Hola hermanos,
El jueves último casi ya terminando nuestra reunión de oración, Adrián quien cumplió 4 años en abril, bajando las escaleras piso en falso y cayó de cabeza al filo de la grada de cemento, lo que produjo que se le abriera la parte superior derecha de la ceja, le tuvieron que hacer 14 puntos (7 por dentro y 7 por fuera), yo pude verle el cráneo, fue una experiencia horrible, nunca me había pasado algo así, pero eso no es todo..., cuando la mamá vino y se llevó al niño, todos en la iglesia quedamos en shock, cuando reaccioné, paré un taxi y con la mamá y el bebe nos fuimos a la maternidad que estaba a 5 minutos, estuve 2 horas con el niño y la madre, hubo llantos y gritos de parte del bebe y de la madre, y mucha angustia y dolor por mi parte; regresamos a casa a las 11:30pm.
Al día siguiente hablé con la madre, yo sabía que la mamá iba a veces a una iglesia pentecostal, ella nunca visitó nuestra iglesia y su pequeño hijo ya venía hace 2 meses..., me disculpé por lo sucedido, y ella me dijo: "Si esto hubiera pasado en mi iglesia, ni los miembros ni el pastor me hubieran acompañado al hospital, ellos no hubieran gastado un centavo para ayudarme, ni siquiera se hubieran ensuciado la camisa y sus manos con la sangre de mi hijo, pero ud. sí lo hizo y estoy muy sorprendida de ello y se lo agradezco".
Cuando terminamos de hablar, salí de la casa con los hermanos que me acompañaron, tenía un nudo en la garganta, quería llorar pero no lo hice y le dí gracias a Dios ya que esto sirvió para tener un fuerte contacto con los padres de Adrián, la invité a la iglesia para esta noche del día de la madre, sé que estará allí.
Cuán importante es que el AMOR que predicamos lo acompañemos con nuestras acciones, he aprendido mucho de esta situación, el Señor es bueno.
Gracias por leer este testimonio,